Ícono del sitio CEFAM │ Centro Especializado en Infertilidad y Atención a la Mujer

Cirrosis del hígado

Descripción general

La cirrosis es una etapa tardía de la formación de cicatrices (fibrosis) en el hígado causada por diversas afecciones y enfermedades hepáticas, como hepatitis y alcoholismo crónico. El hígado desempeña diversas funciones necesarias, que incluyen eliminar sustancias perjudiciales del cuerpo para desintoxicarlo, limpiar la sangre y producir nutrientes vitales.

La cirrosis se produce en respuesta a los daños en el hígado. Cada vez que el hígado se lesiona, este intenta repararse por sus propios medios. En el proceso, se forma tejido cicatricial. A medida que la cirrosis avanza, se forma cada vez más tejido cicatricial, lo que dificulta el funcionamiento del hígado.

La cirrosis descompensada es la expresión utilizada para describir el desarrollo de complicaciones específicas que surgen debido a los cambios que acarrea la cirrosis. La cirrosis descompensada es potencialmente mortal.

En general, los daños en el hígado ocasionados por la cirrosis no se pueden reparar. Sin embargo, si la cirrosis hepática se diagnostica temprano, y se trata la causa, el daño adicional puede limitarse y, en pocos casos, revertirse.

Atención de la cirrosis en Mayo Clinic

Síntomas

La cirrosis, por lo general, no da señales ni tiene síntomas hasta que las lesiones hepáticas se hacen grandes. Cuando sí hay signos y síntomas, estos pueden incluir:

¿Cuándo debes consultar a un médico?

Consulta con tu médico si tienes algunos de los signos o síntomas mencionados anteriormente.

Causas

Existe una gran variedad de enfermedades y afecciones que pueden dañar el hígado y provocar cirrosis. Las causas más frecuentes son las siguientes:

Otras causas posibles son las siguientes:

Complicaciones

Entre las complicaciones de la cirrosis se incluyen:

Complicaciones relacionadas con el torrente sanguíneo:

Otras complicaciones:

Prevención

Reduce el riesgo de cirrosis mediante el cuidado de tu hígado

Si te preocupa el riesgo de cirrosis hepática, consulta a tu médico sobre las formas de reducir el riesgo.

Salir de la versión móvil