Intervención quirúrgica
Ricardo optó por la prudencia y abortó la expedición. Prefirió acudir al especialista en rodilla antes de seguir, por lo que acudió a la Clínica Universidad de Navarra, en Madrid, donde tras el fracaso de un tratamiento conservador y con la idea de que Ricardo recuperase las condiciones para el deporte alpino, los profesionales del Departamento de Traumatología del centro médico, liderados por el doctor José María Silberberg, optaron por realizarle una artroscopia con meniscectomía parcial interna.
«No había otra opción: era operar o operar», asume el madrileño. Pero Ricardo, fiel a su pasión montañera, decidió no arrojar la toalla y retomar su sueño truncado. «El Aconcagua era la meta y la tenía que hacer. Sin pasión no se puede hacer alta montaña».